Pide el Papa a los Obispos de América Latina Combatir a las Sectas

CIUDAD DEL VATICANO. En América Latina es necesario prestar especial atención a las sectas, que constituyen "un grave obstáculo para el esfuerzo evangelizador", dijo hoy el Papa Juan Pablo II.

Al recibir en audiencia a los obispos de la Pontificia Comisión para América Latina, el Papa señaló que "es necesaria una acción pastoral resolutiva para afrontar esta grave cuestión (de las sectas)".

Indicó que para ello hay que revisar "los métodos pastorales empleados, fortaleciendo las estructuras de comunión y misión y aprovechando las posibilidades evangelizadoras que ofrece una religiosidad popular purificada".

Juan Pablo II recordó que para luchar contra ese problema es muy importante la presencia de los evangelizadores, pues allí donde operan sacerdotes, religiosos, religiosas o laicos entregados al apostolado, las sectas no prosperan.

"La fe, aún siendo un don de Dios, no se suscita ni se mantiene sin la mediación de los evangelizadores", acotó.

"Estas tierras que recibieron la luz de Cristo hace ya más de cinco siglos y acogen ahora cerca de la mitad del orbe católico, se distinguen por una identidad cultural profundamente sellada por el Evangelio y cuentan con una Iglesia viva y llena de dinamismo evangelizador".

"En el proceso de fortalecimiento de la fe, la Eucaristía es el lugar privilegiado para el encuentro con Jesucristo vivo. La Misa dominical debe ser compromiso y práctica constante de todos los fieles", agregó el pontífice.

Para el Papa son muchos los desafíos que enfrenta la Iglesia en América Latina y "hace falta una fina intuición eclesial y audacia apostólica para afrontarlos adecuadamente".

Juan Pablo II señaló que uno de ellos es conservar, defender y acrecentar la integridad de la fe y que en esa línea se coloca la Declaración Dominus Iesus sobre la unicidad y la universalidad salvífica de Jesucristo y de la Iglesia, publicada el año pasado.

"Hay que dar un realce particular a la Eucaristía dominical y al domingo mismo, sentido como día especial de la fe, día del Señor resucitado y del don del Espíritu, verdadera Pascua de la semana", declaró el Papa al citar la carta apostólica Novo millennio ineunte.

También se refirió al fomento y cuidado de las vocaciones. "América Latina necesita aún muchos más sacerdotes", aseveró al recomendar a los obispos una presencia "asidua y constante" entre sus seminaristas y sobre todo entre sus sacerdotes.

Juan Pablo II también se refirió a la importancia de evangelizar a los jóvenes pues "en ellos se fundan las esperanzas y las expectativas de un futuro de mayor comunión y solidaridad para la Iglesia y las sociedades de América".

"Vuestras naciones necesitan, hoy como ayer, grandes evangelizadores del temple y talante de Santo Toribio de Mogrovejo, cuya fiesta celebramos hoy".

"Santo Toribio de Mogrovejo, declarado por mí en 1983 Patrono de todos los Obispos de América Latina, es un auténtico paradigma de Pastor que podemos y tenemos que imitar", indicó.

El Papa confió la tarea de la nueva evangelización a la protección y guía de "Santa María de Guadalupe" y recordó que fue en su santuario, en México, donde se publicó la Exhortación Postsinodal para América en 1999.

NTX

Fonte: http://members.tripod.com/ministeriopes1/

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